Urbanismo

Con cada proyecto arquitectónico, diseñamos un pedacito de ciudad

Por Hugo Moreno Freydig

Cuando se habla de urbanismo comúnmente pensamos en el diseño de una ciudad completa, en desarrollo territorial o por zonas, sin embargo, la ciudad la diseñamos todos. Y esto no aplica únicamente a profesionistas de la construcción, sino a todas las personas que habitamos una ciudad.

ovacen.com

Cada vez que proyectamos y construimos algo, aunque regularmente los planos arquitectónicos se concentran dentro de los límites del predio, eso que creamos tiene un impacto a su alrededor. Todo lo que diseñamos genera cambios en la interacción de la sociedad y el comportamiento de las personas; incluso no solo para humanos, sino flora y fauna silvestre.

Desde la construcción de la banqueta, la cual es nuestra responsabilidad por reglamento en caso de nuevas construcciones y remodelaciones, puede ser accesible universalmente o puede convertirse en un obstáculo para nosotros mismos u otras personas. Si tiene árboles o no, si permite ser un refugio temporal en caso de lluvia, mucho sol o esperar el transporte público.

Asimismo, el uso que tenga la construcción dicta en gran medida cómo va a ser la relación de las personas hacia ese lugar. Por ejemplo, en caso de un local comercial, restaurante, plaza o edificio público, éste va a estar constantemente generando movilización de personas hacia el sitio. Es posible que el espacio público se fusione con el interior del predio, generando un sentido de lugar; que las áreas exteriores no sean solo un sitio de paso, sino un espacio de destino o de estancia.

En la medida que tengamos lugares que favorezcan las relaciones sociales, así como entornos urbanos donde las vías tengan una velocidad más controlada, se genera una mayor comunidad, permitiendo a las personas interactuar en un ambiente sano, accesible, seguro, cómodo y agradable.

Imagen 1. Interacciones sociales en las calles (Appleyard, 1981)

En la imagen 1 se muestra un diagrama elaborado por Donald Appleyard, donde se presenta el diferencial de interacciones sociales y movimiento que hay en un vecindario con respecto a la cantidad de tráfico vehicular que exista en el sitio. Entre menor tráfico vehicular, mayor la cantidad de personas que se movilizan, visitan vecinos y se genera mayor cantidad de puntos de encuentro e interacciones entre las personas.

Además del tráfico, en zonas de clima cálido como en Sonora, la calidad del espacio, relacionado a la sombra y vegetación, es de gran importancia.

Imagen 2. Banqueta con sombra de árboles en Seattle, Washington (Seattle DoT, 2017)

La imagen 2 muestra un ejemplo de banqueta que se encuentra altamente sombreada, gracias a la cantidad y distribución de árboles plantados, los cuales, además de generar un ambiente de microclima controlado, crean una mayor sensación de confort, tranquilidad y comodidad.

Diversos elementos de nuestros diseños arquitectónicos influyen en el entorno de nuestras obras, por ello es importante siempre tomar en cuenta el contexto físico del lugar, así como las posibles interacciones y movilizaciones que puedan derivarse de nuestros proyectos.

Autor:
Hugo Moreno Freydig
Arq; M.C; MSc.

Arquitecto, Maestro en Ciencias Ambientales y activista por la movilidad sostenible, accesibilidad universal y seguridad vial. Cofundador del despacho de urbanismo y arquitectura: UrbanDot.mx

lumari® 2021-2022
Todos los derechos reservados

¿Cómo enviar mis proyectos?

Acerca de nosotros

Nacemos con el firme objetivo de desarrollar la cultura de la arquitectura y fomentar el valor en arquitectos sonorenses.

Contacto

contacto@lumari.mx
Hermosillo, Sonora.
662 342 2616